La red Flexa hace posible los pagos criptocolateralizados en proveedores físicos. 

La red admite las criptomonedas compatibles, como BTC, ETH y otras, para pagar productos y servicios, mientras que el proveedor recibe el pago en moneda fiat. 

Flexa utiliza su token, “AMP”, para colateralizar los pagos con criptomoneda mientras se confirman en las respectivas redes de activos digitales, y liquida el pago en moneda fiat al destinatario. Esto resuelve algunos problemas que han plagado el ecosistema de las criptomonedas, como los tiempos de confirmación lentos en las redes, la volatilidad de los precios y la amplia adopción.